martes, 23 de noviembre de 2010

Desamparo


En la calle las sombras,se trepan a los miedos.
La oscuridad dibuja,estatuas por doquier.
Es destello de luces,la pupila de un gato.
El maligno pasea,con rostro de desdén.

Inconciente en un banco,el jóven se estremece.
Aquella pesadilla,se repite otra vez.
Con susurro de llanto,su voz,pidiendo ayuda.
Agoniza en la plaza,pero nadie lo vé.

En su cuarto se escucha,su C.D.preferido.
Y cubren las paredes,los dueños de esa voz.
En un poster gigante,su rostro casi niño.
Enfrenta al mismo Jordan,que un día quiso ser.

En el gimnasio queda,un aro solitario.
La volcada,los sueños, que ya no podrán ser.
El tiro más certero,pegó en el infinito:
en vano el canto nombra,la suerte de volver.

2 comentarios:

  1. Querido amigo,este mal que era sólo un fantasma
    ahora nos toca muy de cerca.y me quedo pensando
    ante estos sucesos,qué podríamos haber hecho para evitarlo.Y en esos hogares que sin siquiera sospecharlo,deben continuar viviendo con el dolor de una pérdida absurda.De dónde sacarán fuerzas para poder seguir...es muy doloroso.

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